Esta es la homilía del día 31 de mayo de 2008.
Resumen de la homilía:
Moisés nos dio los Diez Mandamientos recibidos de Dios. Se reúnen en dos: amar a Dios sobre todo y al prójimo como a sí mismo. El joven preguntó a Jesús: ¿qué debo hacer para ir al cielo? Jesús le contestó: cumple los Mandamientos. Nos salvamos por la fe en Jesús. Pero… El apóstol Santiago dice: la fe sin obras está muerta, no vale. ¿Qué obras debemos hacer? Cumplir la voluntad del Padre. ¿Cuál es la voluntad del Padre? Que seamos santos. La santidad está en vivir la fe y la perseverancia. Padrenuestro: Hágase tu voluntad en la tierra y en el cielo. Jesús vino a hacer siempre la voluntad del Padre. Obrar siempre por amor a Dios y a los demás.
______________________________
Estas son las lecturas del día 31 de mayo de 2008 .
PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Deuteronomio ( 11, 18. 26-28. 32)
Moisés habló al pueblo, diciendo: “Guarden estas palabras mías en el corazón y en el alma, que para ti sean una señal atada a tu mano, como un signo en tu frente. Yo pongo delante de ustedes bendición y castigo; la bendición si obedecen los mandamiento del Señor, vuestro Dios, que yo les mando hoy; el castigo, si no obedecen los mandamientos del Señor, vuestro Dios, y se separan del camino que yo les digo, caminando detrás de dioses extranjeros, que no conocían. Obedeceréis todos los mandatos y leyes que yo le mando ahora.”
Moisés habló al pueblo, diciendo: “Guarden estas palabras mías en el corazón y en el alma, que para ti sean una señal atada a tu mano, como un signo en tu frente. Yo pongo delante de ustedes bendición y castigo; la bendición si obedecen los mandamiento del Señor, vuestro Dios, que yo les mando hoy; el castigo, si no obedecen los mandamientos del Señor, vuestro Dios, y se separan del camino que yo les digo, caminando detrás de dioses extranjeros, que no conocían. Obedeceréis todos los mandatos y leyes que yo le mando ahora.”
Palabra de Dios.
R. Te alabamos Señor.
SALMO RESPONSORIAL 30
R. Señor, tú eres la roca de mi refugio.
Señor, a ti, me uno;
que yo nunca quede frustrado;
tú, que eres justo, sálvame,
escucha mis palabras;
que yo nunca quede frustrado;
tú, que eres justo, sálvame,
escucha mis palabras;
ven pronto a salvarme.
R. Señor, tú eres la roca de mi refugio.
Acepta ser la roca de mi refugio,
una defensa que me salve,
tú que eres mi roca y mi defensa;
una defensa que me salve,
tú que eres mi roca y mi defensa;
por tu nombre dirígeme y guíame.
R. Señor, tú eres la roca de mi refugio.
Que tu rostro brille encima de tu siervo,
sálvame por tu misericordia.
Sean fuertes y valientes de corazón,
los que esperan en el Señor.
R. Señor, tú eres la roca de mi refugio.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Romanos ( 3, 21-25ª. 28)
Hermanos: Ahora, la Justicia de Dios, anunciada por la Ley y los profetas, se ha manifestado independientemente de la Ley. Por la fe en Jesucristo viene la justicia de Dios a todas las personas que creen, sin ninguna diferencia. Porque todos pecaron y a todos les falta la gloria de Dios. Pero Él, gratis, les regala su perdón y su amistad, por la salvación de Cristo Jesús a quien Dios ha elegido para ser la víctima sal sacrificio que nos consigue su perdón, por la fe en su sangre. Nosotros decimos que el hombre es perdonado por la fe y no por cumplir la Ley.
Palabra de Dios.
R. Te alabamos Señor.
R. Te alabamos Señor.
EVANGELIO
Lectura del santo evangelio según san Mateo ( 7, 21-27)
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “No toda persona que me dice “Señor, Señor” entrará en el reino de los cielos, entrará el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo.
Aquel día muchos dirán: “Señor, Señor, nosotros profetizamos en tu nombre, y expulsamos demonios en tu nombre, y también en tu nombre hicimos muchos milagros.”
Yo entonces les diré: “Yo nunca los he conocido. Apártense de mí, malvados.”
La persona que escucha estas palabras mías y las hace en obras se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa encima de la roca. Cayó mucha lluvia, los ríos se desbordaron, soplaron fuertes vientos contra la casa; pero no se cayó, porque estaba edificada encima de la roca.
La persona que escucha estas palabras mías y no las realiza en obras se parece a aquel hombre tonto que edifico su casa encima de la arena. Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron fuertes vientos y golpearon contra la casa, y se derrumbó totalmente.
Palabra del Señor.
R. Gloria a ti Señor Jesús.
-----------------------------------------