En el Nuevo Testamento, se cuenta como Jesús resucitó a varias personas, como la hija de Jairo, poco después de morir, el hijo de la viuda de Naín, resucitado cuando lo llevaban a enterrar, o Lázaro, amigo personal de Jesús, que llevaba cuatro días enterrado. En el momento de la muerte de Jesús, siempre según el Nuevo Testamento, se abrieron las tumbas, y varios muertos volvieron a la vida. Tras la resurrección de Jesús, muchas de las personas santas que habían muerto también salieron de sus tumbas y entraron en Jerusalén, apareciéndose a muchos, según el Evangelio de San Mateo.
En el Nuevo Testamento se dice que Jesucristo resucitó tres días después de su muerte (ver Mateo 28, Marcos 16, Lucas 28, Hechos 10:40), y así también todos nosotros podremos resucitar (ver 1º Corintios 15:20-22)
También los apóstoles y santos cristianos realizaron resurrecciones. San Pedro resucitó a una mujer cuyo nombre era Dorcas, y San Pablo hizo lo mismo con un hombre llamado Eutychus, que había muerto al dormirse en una ventana, según cuenta el libro de Hechos de los Apóstoles
También la Virgen María, según algunos grupos cristianos, fue subida en cuerpo y alma al Cielo (la Asunción de María, que fue aprobada como dogma de fe en 1950 por la Iglesia Católica), aunque los autores no están de acuerdo si la Virgen había muerto, o solo estaba en un estado parecido al sueño (la Dormición de María). En otras tradiciones, la Asunción tiene lugar en Éfeso. Aquí vivió la Virgen sus últimos días, bajo el cuidado de San Juan Evangelista, siguiendo el mandato que le dio Jesús en la Cruz: "Hijo, aquí tienes a tu Madre". Durante siglos, muchas personas han asegurado ver a la Virgen.
En el Antiguo Testamento, se dice que Eliseo resucitó a un muchacho. En cualquier caso, todas estas personas resucitadas murieron después. Como el cristianismo derivó desde los judíos, hay que señalar que el Judaísmo también tiene como principio de fe la Resurrección de los muertos. Una famosa autoridad Judía, Maimónides, indicó trece principios de la fe judía, y la Resurrección es uno de ellos, y señala: "Creo con fe sincera que los muertos resucitarán, cuando Dios lo desee. Sea el Nombre de Dios bendito, y Su recuerdo se conserve por los siglos de los siglos".
En la época de Jesús, los fariseos, creían en la futura Resurrección, y los saduceos no creían. Jesús declaró estar de acuerdo con los fariseos. La mayoría de las iglesias cristianas enseñan que habrá una resurrección general al "final de los tiempos".
En el Nuevo Testamento se dice que Jesucristo resucitó tres días después de su muerte (ver Mateo 28, Marcos 16, Lucas 28, Hechos 10:40), y así también todos nosotros podremos resucitar (ver 1º Corintios 15:20-22)
También los apóstoles y santos cristianos realizaron resurrecciones. San Pedro resucitó a una mujer cuyo nombre era Dorcas, y San Pablo hizo lo mismo con un hombre llamado Eutychus, que había muerto al dormirse en una ventana, según cuenta el libro de Hechos de los Apóstoles
También la Virgen María, según algunos grupos cristianos, fue subida en cuerpo y alma al Cielo (la Asunción de María, que fue aprobada como dogma de fe en 1950 por la Iglesia Católica), aunque los autores no están de acuerdo si la Virgen había muerto, o solo estaba en un estado parecido al sueño (la Dormición de María). En otras tradiciones, la Asunción tiene lugar en Éfeso. Aquí vivió la Virgen sus últimos días, bajo el cuidado de San Juan Evangelista, siguiendo el mandato que le dio Jesús en la Cruz: "Hijo, aquí tienes a tu Madre". Durante siglos, muchas personas han asegurado ver a la Virgen.
En el Antiguo Testamento, se dice que Eliseo resucitó a un muchacho. En cualquier caso, todas estas personas resucitadas murieron después. Como el cristianismo derivó desde los judíos, hay que señalar que el Judaísmo también tiene como principio de fe la Resurrección de los muertos. Una famosa autoridad Judía, Maimónides, indicó trece principios de la fe judía, y la Resurrección es uno de ellos, y señala: "Creo con fe sincera que los muertos resucitarán, cuando Dios lo desee. Sea el Nombre de Dios bendito, y Su recuerdo se conserve por los siglos de los siglos".
En la época de Jesús, los fariseos, creían en la futura Resurrección, y los saduceos no creían. Jesús declaró estar de acuerdo con los fariseos. La mayoría de las iglesias cristianas enseñan que habrá una resurrección general al "final de los tiempos".