EL BANQUETE EUCARÍSTICO

LA COMUNIÓN


Toda la celebración de la Eucaristía nos lleva a participar en la mesa preparada, alimentarse del Cuerpo y de la Sangre de Jesucristo. Es el Banquete Pascual, al que está invitada la Iglesia.


EL PADRENUESTRO
Es la oración del Señor, con la que los hijos se comunican con el Padre.
Manifiesta todo lo que se nos da en el sacramento de la Comunión: el pan de este mundo y el Pan de Vida, el Reino, el perdón de Dios y el poder de perdonarnos unos a otros, el librarnos del mal y del Demonio.
Diremos todos juntos la oración del Padrenuestro que nos en, para que nos enseñó el Señor, para que nos prepare para recibir mejor la Eucaristía.

EL GESTO DE LA PAZ
Al darnos la paz aceptamos el compromiso de trabajar por la unión y la paz entre los hermanos, como condición necesaria para participar bien en la Comunión. El gesto de la paz no significa solamente la paz individual, sino también con todas las personas.
Debemos trabajar para que haya igualdad en la sociedad y en la Iglesia, para que no haya enemigos por causa de las razas, cultura, dinero, etc.
La paz se hace dando la mano, un abrazo, pero sólo con las personas que tenemos al lado en la iglesia.
El sacerdote da la paz a todos con estas palabras: “La paz del Señor esté siempre con vosotros”.

LA FRACCIÓN DEL PAN
Los primeros cristianos llamaban a la Misa: “fracción del Pan”. El partir el único Pan que es Jesucristo, significa que es una comunidad que participa del mismo alimento: Jesucristo.
Mientras el sacerdote parte el pan, se dice el “Cordero de Dios”.

LA COMUNIÓN
El sacerdote presenta el Cuerpo de Cristo: “Este es el Cordero de Dios...Jesucristo se entrega a los que somos pecadores como perdón y ayuda, pero los pecados graves sólo se perdonan en el Sacramento de la Reconciliación. (Confesión)
Al darte la comunión el sacerdote te dice: “El cuerpo de Cristo” y tu respondes: “Amén”. La comunión nos une a Jesucristo, pero también a los hermanos. Al terminar la comunión el sacerdote dice una oración que se llama “Poscomunión”.