Esta es la homilía del día 18 de octubre de 2008.
Resumen de la homilía:
Así dice el Señor a Ciro, su ungido: Yo te he llevado de la mano para vencer a las naciones y humillar a los reyes. Yo hice que las puertas se abrieran y no se cerraran. Por amor a mi siervo Jacob, a mi elegido Israel te he llamado por tu nombre, te di un título, aunque tu no me conocías. Yo soy el Señor y no hay otro dios. Sin que tú me conocieras estuve contigo, para que todos sepan de Oriente a Occidente que no hay nada fuera de mí. Yo soy el Señor y no hay otro.
R.-Alabad la gloria y el poder del Señor.
Cantad al Señor una canción nueva,
cantad al Señor, todo el mundo.
Cantad a las gentes la gloria del Señor,
sus maravillas a todos los pueblos.
R.-Alabad la gloria y el poder del Señor.
Porque es grande el Señor. Y merece la alabanza,
más poderoso que todos los dioses.
Porque los dioses de los gentiles son falsos,
y nuestro Dios hizo el cielo y la tierra.
R.-Alabad la gloria y el poder del Señor.
Familias de los pueblos, alabad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor.
Alabad la gloria y el nombre del Señor,
entrar en su templo con ofrendas.
R.-Alabad la gloria y el poder del Señor.
Arrodillarse ante el Señor en el templo,
respeten al Señor todas las personas.
Decid a los pueblos que el Señor es rey,
el Señor gobierna eternamente.
R.-Alabad la gloria y el poder del Señor.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Tesalonicenses (1, 1-5 b)
R. Te alabamos Señor.
EVANGELIO
Los fariseos se reunieron para buscar la forma de coger a Jesús en algunas palabras que dijese. Le enviaron discípulos de los fariseos junto con algunos del partido de Herodes, para preguntar a Jesús: “Maestro, nosotros sabemos que tu eres sincero y enseñas con verdad a vivir como Dios quiere; no te preocupa el qué dirán los demás. Queremos saber tu opinión: ¿Qué te parece? Nosotros, los judíos, ¿estamos obligados a pagar el impuesto al César de Roma o no pagamos?” Jesús, conociendo su mala idea, les dijo: “Falsos, ¿por qué me ponen trampas? Enseñadme la moneda con la que se paga el impuesto.”
Ellos le presentaron un denario.
Jesús les preguntó: “¿De quién es esta imagen?” Le contestaron: “Del César.”
Jesús les dijo: “Pues den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.”Al oír la respuesta se quedaron asombrados y, dejando a Jesús, se fueron.