Domingo I de Adviento

Esta es la homilía del día 27 de noviembre de 2010.




homilía 27-11-2010
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Resumen de la homilía:

En el tiempo de Adviento empieza el nuevo Año de la Iglesia. Adviento nos recuerda que estamos esperando la venida gloriosa del Salvador. En este tiempo nuestra oración debe ser: ¡Ven Señor Jesús! Es el Príncipe de la Paz. San Pablo avisa: “ahora nuestra salvación está más cerca que cuando recibimos la fe.” Vivimos despreocupados y, sin esperarlo, vendrá Jesús por segunda vez. Vendrá de sorpresa, a perdonar y salvar, por amor. También podemos morir y al momento ser juzgados por nuestras obras buenas y malas. Adviento es un tiempo especial de preparación para recibir al Señor que viene. Mientras el Señor llega, trabajemos y colaboremos por el bien y la paz de todos. Jesús sigue viniendo cada día en la Eucaristía, la Misa, que recibimos con fe. Si estamos seducidos por Jesús, sí deseamos su venida, digamos con el corazón:
¡Ven, SEÑOR JESÚS!
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Estas son las lecturas del sábado 27 de noviembre de 2010.


PRIMERA LECTURA


Lectura del profeta Isaías. (2, 1-5)


Isaías, hijo de Amós, tuvo una visión de Judá y Jerusalén: En el futuro estará fuerte la casa del Señor en lo alto de los montes, por encima de las montañas. Vendrán gentes de todos los pueblos, diciendo: Vengan, subamos al monte del Señor, a la Casa del Dios de Jacob. El Señor nos enseñará sus caminos y caminaremos por sus sendas: porque de Israel brotará la ley, de Jerusalén la palabra del Señor. El Señor gobernará las naciones. Será Juez de todos los pueblos. Romperán las espadas para hacer arados; de las lanzas harán hoces. Ya no luchará un pueblo contra otro pueblo, no se entrenarán para la guerra. Pueblo mío, ven: caminemos a la luz del Señor.

Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor-


SALMO RESPONSORIAL 121, 1-2, 3-4


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


Qué alegría cuando me dijeron: “Vamos a la casa del Señor.”

Ya estamos caminando por tus calles, Jerusalén.


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


Jerusalén está hecha como ciudad fuerte.

Allá van todas las personas, los fieles del Señor.


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


Según la costumbre de Israel, a celebrar la fiesta del Señor.

En ella están los jueces, en el palacio de David.


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


Desear la paz a Jerusalén: vivan felices los que te aman,

Que tengan paz en sus calles, seguridad en tus palacios.


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


Por mis hermanos y compañeros, yo diré: “la paz contigo.”

Por la casa del Señor nuestro Dios, te deseo mucho bien.


R.-Vamos alegres a la casa del Señor.


SEGUNDA LECTURA


Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos. (13, 11-14)


Hermanos: Piensen en el momento que viven: ya es hora de despertar del sueño, porque ahora nuestra salvación está más cerca que cuando empezamos a creer. La noche está terminando, el día ya llega: abandonemos las obras del mal y obremos el bien.

Vivamos a la luz, con bondad. Nada de banquetes y borracheras, nada de lujuria ni libertinaje, nada de riñas ni peleas. Ser testigos del Señor Jesucristo.

Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor.


EVANGELIO


Lectura del santo Evangelio según san Mateo. 24, 37-44


En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “El día y la hora del fin del mundo, nadie lo sabe, ni los ángeles del cielo; sólo lo sabe mi Padre.

Porque igual que en los días de Noé, lo mismo será la venida del Hijo del hombre. En los días antes del diluvio, las gentes comían, bebían, se casaban, hasta el día que Noé entró en el Arca; y no se dieron cuenta hasta que vino el diluvio y los mató a todos. Así será la venida del Hijo del hombre.

Entonces estarán dos hombres en el campo trabajando; a uno se lo llevarán y al otro lo dejarán. Dos mujeres estarán moliendo trigo; a una se la llevarán y a la otra la dejarán, Estar atentos, porque no se sabe cuando llegará el Señor.

Piensen bien que si el padre de familia sabe a la hora que viene el ladrón, vigilará para no dejarle entrar en la casa.

Por eso ustedes deben estar preparados, porque a la hora que menos piensan vendrá el Hijo del hombre.

Palabra del Señor.

R.-Gloria a ti, Señor Jesús.