XVII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO




RESUMEN HOMILÍA DOMINGO 17 ORDINARIO  C

En el bautismo morimos al pecado y resucitamos a la vida nueva con Jesús.
El Bautismo a los niños los hace hijos adoptivos de Dios y miembros de la Iglesia.
A los mayores también les perdona todos los pecados pasados y son parte de la Iglesia.

Los apóstoles le dijeron a Jesús: “Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó.”
¿Qué es orar? Santa Teresa dice: “Orar es tratar de amistad con quien yo se que me ama.”
María, hermana de Lázaro: “Señor, el que tu amas, está enfermo.” No hace falta más.

Jesús oraba mucho, se comunicaba con el Padre en todo momento.
Antes  de hacer un milagro, al elegir a sus discípulos, en el Huerto de los Olivos…
También oró estando en la cruz: “Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen.”

Jesús nos dice: “Pedid y recibiréis, llamad y se os abrirá, buscad y encontraréis.
¿Siempre recibimos lo que pedimos, encontramos lo que buscamos?
Orar no es sólo pedir, también es alabar a Dios, darle gracias por todo lo que nos da…
Al terminar de orar debemos decir: “Hágase tu voluntad, lo que tu quieras es lo mejor.”


DOMINGO 17 DEL TIEMPO ORDINARIO  C

PRIMERA LECTURA

Lectura del libro del Génesis  ( 18, 20-32)

En aquellos días el Señor dijo: “La acusación contra Sodoma y Gomorra es fuerte, y su pecado grave; voy a bajar. A ver si sus acciones están de acuerdo con la acusación.”
Los hombre fueron a Sodoma y el Señor se quedó en compañía de Abrahán.
Entonces Abrahán dijo a Dios: ·”¿Quieres destruir al inocente con el culpable? Si hay cincuenta inocentes en la ciudad, ¿los destruirás y no perdonarás al lugar por los cincuenta inocentes que hay allí? ¡No puedes hacer eso!, matar al inocente por el culpable, y que la suerte del inocente sea igual que la del culpable; el juez de todo el mundo, ¿no hará justicia? El Señor contestó: “Si veo el la ciudad de Sodoma cincuenta inocentes, perdonaré a toda la ciudad por ellos.”
Abrahán respondió: “Quiero hablar a mi Señor, yo que soy polvo y ceniza. Si faltan cinco para los cincuenta inocentes, ¿destruirás por cinco, toda la ciudad?”
El Señor respondió: “No la destruiré, si encuentro allí cuarenta y cinco.” Abrahán dijo otra vez: “Puede ser que sólo encuentres cuarenta,” El Señor le respondió: “Por los cuarenta, no lo haré.” Abrahán dijo: “Que no se enfade mi Señor, si hablo otra vez. “¿Y si encuentras treinta?” El Señor respondió: No lo haré, si encuentro allí treinta.”
Dijo Abrahán. ¿Y si encuentras solo veinte? Respondió el Señor: “Por los veinte, no lo destruiré:” Abrahán continuó: “Que no se enfade mi Señor si hablo otra vez. ¿Y si encuentras diez?” Contestó el Señor: “Por los diez, no la destruiré.”
Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor.

SALMO RESPONSORIAL.  137. 1-2. 2-3. 6-7. 7-8

S.-Señor, cuando te llamé, me escuchaste.
Señor, te doy gracias de todo corazón;
delante de los ángeles cantaré para ti, me arrodillaré en tu santuario.

S.-Señor, cuando te llamé, me escuchaste.
Daré gracias a tu nombre, por tu misericordia y fidelidad.
Cuando te llamé me escuchaste, aumentaste el valor de mi alma.

S.-Señor, cuando te llamé, me escuchaste.
El Señor es muy grande, y mira al humilde, y de lejos conoce al soberbio.
Cuando camino por peligros, me cuidas la vida;
y extiendes tu brazo contra la ira de mi enemigo.


 S.-Señor, cuando te llamé, me escuchaste.
Y tu brazo derecho me salva. El Señor aumentará sus ayudas conmigo.
Señor, tu misericordia es eterna, no abandonas la obra de tus manos.

 S.-Señor, cuando te llamé, me escuchaste.

SEGUNDA LECTURA

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses. ( 2, º12-14)

Hermanos: cuando nos bautizamos morimos con Cristo y resucitamos con Él, porque tenemos fe en el poder de Dios que resucitó a Jesús después de muerto.
Estábamos muertos por los pecados, porque no estábamos circuncidados; pero Dios nos dio nueva vida en Él, perdonándonos todos los pecados, al morir Jesús en la cruz.
Palabra de Dios.

R.-Te alabamos Señor.

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Lucas. ( 11, 1-13)

Jesús estaba orando. Cuando terminó, uno de sus discípulos les dijo: “Señor, enséñanos a orar, como Juan enseñó a sus discípulos.” Jesús les dijo: “Cuando oren digan: “Padre,
Santificado sea tu nombre, venga tu reino, danos cada día nuestro pan, perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos al que nos debe algo, y no nos dejes caer en la tentación.” Y les dijo: “Si alguno de ustedes tiene un amigo, y viene por la noche muy tarde, para decirle: “Amigo, préstame tres panes, porque ha venido uno de mis amigos y no tengo nada que darle.” Y, desde dentro de la casa le responde: “ No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados; no puedo levantarme para dártelos.”
Si el otro insiste llamando, yo les digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, para que  no moleste más se levantará y le dará lo que necesite.
Pues les digo a ustedes: Pedid y se les dará, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá; porque el que pide recibe, el que busca encuentra, al que llama se le abre.
Qué padre, cuando un hijo le pide pan,le dará una piedra? ¿O si le pide un pez, le dará una serpiente? Si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas  a sus hijos, ¿cuánto más vuestro Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?
Palabra del Señor.

R.-Gloria a ti, Señor Jesús.